Sonido y espacio. GONZÁLEZ DE LA RUBIA, Domingo

Por: Tipo de material: ArtículoArtículoDetalles de publicación: 2002: Associació Catalana de Compositors, BarcelonaDescripción: 9 p En: Música d'Ara Núm. 5, 2002, p. 54Resumen: RESUMEN: Algunos consideran que el sonido puede generar espacio, pero esta afirmación es como mínimo arriesgada. Frecuentemente se confunde el espacio real con una ficticia sensación espacial, es decir, con un espacio virtual. Aunque se puede afirmar que los sonidos poseen un espacio físico, debemos concluir tajantemente que los sonidos no ocupan ese espacio que nosotros entendemos como en el que los objetos se desenvuelven. Ahora bien, podríamos admitir que los sonidos fuesen suceptibles de generar un espacio geométrico, en este caso ideal y abstracto, absolutamente ajeno a su existencia en la realidad que nos envuelve. El principal factor que nos hace relacionar los sonidos con el espacio es, sin duda, el doble sentido que damos al término tiempo. Por un lado lo consideramos duración pura en movimiento; por otro, vacuidad homogénea en la que se desarrollan duración y movimiento. A los sonidos sólo les corresponde propiamente la primera definición, la de la heterogeneidad cualitativa, mientras que la segunda resulta una falsificación conceptual que acaba espacializando la duración pura.
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RESUMEN: Algunos consideran que el sonido puede generar espacio, pero esta afirmación es como mínimo arriesgada. Frecuentemente se confunde el espacio real con una ficticia sensación espacial, es decir, con un espacio virtual. Aunque se puede afirmar que los sonidos poseen un espacio físico, debemos concluir tajantemente que los sonidos no ocupan ese espacio que nosotros entendemos como en el que los objetos se desenvuelven. Ahora bien, podríamos admitir que los sonidos fuesen suceptibles de generar un espacio geométrico, en este caso ideal y abstracto, absolutamente ajeno a su existencia en la realidad que nos envuelve. El principal factor que nos hace relacionar los sonidos con el espacio es, sin duda, el doble sentido que damos al término tiempo. Por un lado lo consideramos duración pura en movimiento; por otro, vacuidad homogénea en la que se desarrollan duración y movimiento. A los sonidos sólo les corresponde propiamente la primera definición, la de la heterogeneidad cualitativa, mientras que la segunda resulta una falsificación conceptual que acaba espacializando la duración pura.

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