| 000 | 03657cam a2200349 i 4500 | ||
|---|---|---|---|
| 001 | 130803 | ||
| 003 | ES-MaCDAEM | ||
| 005 | 20250414123522.0 | ||
| 007 | ta | ||
| 008 | 250414s2023 sp a | |||| 000 0 spa | ||
| 017 |
_aCO 1797-2023 _bOficina Depósito Legal Córdoba |
||
| 020 | _a9788411319492 | ||
| 040 |
_aSpMaBN _bspa _cSpMaBN _erda _dES-MaCDAEM |
||
| 080 | _a792.82 | ||
| 100 |
_aRodríguez Vacas, Mar _eautoría _4aut _9143060 |
||
| 245 | 1 | 0 |
_aEso no estaba en mi libro de historia de ballet clásico _cMar Rodríguez Vacas |
| 250 | _aPrimera edición: noviembre de 2023 | ||
| 264 | 1 |
_aCórdoba _bAlmuzara _c2023 |
|
| 264 | 4 | _c©2023 | |
| 300 |
_a302 páginas _bilustraciones (blanco y negro) _c24 cm |
||
| 336 |
_atexto _2rdacontent _btxt |
||
| 337 |
_asin mediación _2rdamedia _bn |
||
| 338 |
_avolumen _2rdacarrier _bnc |
||
| 490 | 0 |
_aColección Historia (Almuzara) _9143061 |
|
| 504 | _aBibliografía: páginas 301-302 | ||
| 520 | 3 | _a¿Sabías que el mismísimo rey Alfonso XIII se vio sorprendido por Diaghilev, impulsor de los Ballets Rusos, cuando éste se atrevió a decirle que ambos eran iguales porque no hacían nada? ¿O que Marius Petipa tuvo que salir huyendo de España para no volver jamás? ¿O que el bailarín Rudolf Nureyev aprovechó una gira por París para desertar de la Unión Soviética, puesto que, si regresaba a Rusia, jamás podría volver a salir del país? ¿Quedó contento Tchaikovsky con la partitura de «El lago de los cisnes»? ¿Influyeron las continuas infidelidades del marido de la bailarina Margot Fonteyn con el hecho de que ella no se bajara de los escenarios hasta los sesenta años? ¿Qué relación guarda Picasso con el «ballet»? ¿Cómo acabó un bailaor de flamenco autodidacta enrolado en los Ballets Rusos y encerrado de por vida en un manicomio británico? La danza nació en las cortes reales, pero el «ballet» eclosionó en pleno Romanticismo. Los espectros de unas monjas tuvieron parte de culpa, pero las zapatillas de punta, el color blanco y el tul vaporoso de los vestidos hicieron el resto. Mientras las bailarinas enseñaban más de lo permitido, hombres y mujeres acudían en tropel a ver aquel espectáculo inédito en una época en la que mostrar un tobillo podía ser delito. El morbo estaba servido. Sólo las élites llenaban los teatros, pero todas las jóvenes querían ser bailarinas. Y sus familias mataban por conseguir un puesto para ellas en las escuelas públicas. Y llegaron los Taglioni, los Petipa, Tchaikovsky, Minkus, la Fonteyn, la Pavlova, Nureyev y Diaghilev. Y lo revolucionaron todo. Y con ello, hicieron historia dentro de la historia. Detalles, anécdotas y aventuras que provocaron que el «ballet» clásico sea lo que hoy es. «El lago de los cisnes», «El cascanueces», «La bayadera», «El corsario», «Giselle», «La sílfide», «Paquita»… son títulos que en estos tiempos siguen colgando el cartel de «No hay billetes» en los mejores escenarios del mundo. Las suyas son historias que guardan incontables vivencias que merecen ser contadas. La historia del «ballet» se escribió en paralelo a la historia universal, viéndose influida por todo aquello que ocurría en el mundo. Estas páginas plantean un viaje insólito por los caminos difíciles, duros y enigmáticos, pero bellos, emocionantes y expresivos, del «ballet» clásico. ¿Bailamos? | |
| 650 | 0 |
_aBallet _vHistoria _2embne _9141184 |
|
| 650 | 0 |
_aDanza _9115259 |
|
| 650 | 0 |
_aHistoria de la danza _9114695 |
|
| 856 | 2 |
_uhttps://bibliotecacdt.mcu.es/cgi-bin/koha/opac-retrieve-file.pl?id=95ccb8ce5a8b50cbed14c157a4282209 _yMuestra del libro |
|
| 942 |
_cMONO _2udc |
||
| 999 |
_c130803 _d130803 |
||